Portada » A MADURO NO LO QUIERE NADIE

A MADURO NO LO QUIERE NADIE

por elregional

POR EMIRO ALBORNOZ LEÓN

A veces, cuando escucho a Nicolás en sus constantes e insoportables peroratas, generalmente en cadena de medios radioeléctricos para más arrechera, durante las cuales se cae a mentiras él mismo, porque este pueblo ya está curado de espantos y  conoce muy bien lo embustero del tercio, me pregunto si en realidad no conoce la amarga verdad que rodea su figura al ser rechazado o despreciado por el noventa por ciento de la nación, que es una cifra histórica que no se ha dado ni en Venezuela ni en ninguna otra parte del mundo democrático. 

Traigo a colación este tema porque Maduro siempre habla del apoyo del pueblo a esa rara cosa que ellos llaman  la revolución bolivariana y de una serie de ejecutorias en materia de obras de infraestructura que solamente existen en su mente porque , luego de transcurridos más de veinte años de este bodrio revolucionario, Venezuela se encuentra devastada, destruida, arruinada e invivible, y de allí la diáspora que vive este pueblo con cerca de seis millones de compatriotas que han dejado el suelo patrio en búsqueda del bienestar que está mierda de gobierno les niega.                           

No se puede entender cómo en un pais, donde el noventa por ciento de los venezolanos no tiene como cumplir con la satisfacción  de la primaria necesidad de todo ser humano como es la alimentación, donde la gente gana un salario mínimo de setenta centavos de dólar que no alcanza hoy día para comprar un paquete de harina de maíz, mucho menos para comprar las necesarias proteínas como son la leche, el queso, la carne, etc, pueda estar apoyando al gobernante que los tiene pasando hambre hereje.                               

 Maduro realmente está consciente que nadie lo quiere, que el pueblo lo responsabiliza por el calvario que vive ante la hambruna y el colapso de los servicios públicos, especialmente la electricidad, el agua potable que afecta a más de tres cuartas partes del país, pero en sus soliloquios se hace el loco y pretende hacer ver que su gestión, desastrosa y accidentada, goza del apoyo popular.                                 

Al momento de redactar este artículo este domingo se encontraba encadenado como ya es costumbre, y escuché como hablaba de una obra de gobierno que nadie ve ni siente.                   

Hablaba del impulso a la educación y mencionaba la ejecución de obras y acciones dirigidas a garantizar una educación de calidad, cuando la realidad es que sus cinco años legales de gobierno y los de usurpación del poder que lleva ya, el proceso educativo se paralizó hasta el punto que hay, antes de la pandemia, registros y estudios muy serios de organizaciones internacionales e instituciones del país, en los s cuales se habla de cerca del cincuenta por ciento de deserción escolar debido al hambre y a la falta de recursos de los padres de familia para poder enviar a sus hijos a los centros educativos, los cuales a su vez se encuentran imposibilitados, en su mayor parte, para recibir    a los educandos por el estado desastroso en que se encuentran las instalaciones sanitarias, la falta de agua potable y de materiales de apoyo a la accion docente.                               

Maduro está muy persuadido de su impopularidad, de allí su empeño en aceptar que se nombre un Consejo Nacional Electoral de común acuerdo con la oposición democrática para permitir que se designen unos rectores electorales que brinden confianza al pueblo que su voto será respetado, porque sabe que los venezolanos saldrían masivamente a darle una paliza de votos democráticos que hara que sus candidatos no logren triunfar en una sola de las Gobernaciones y Alcaldías del país, y llegado el momento de un referendo revocatorio lo arrojará del poder con un rotundo NO a que siga gobernando, por incapaz..                   

Emiro Albornoz León/Periodista.

[email protected]

Te puede interesar

Copyright © 1990-2024 - Todos los derechos reservados.