POR: ING. LUIS COVIS
Un viejo amigo, ex funcionario de la Policía de Falcón, me comentaba que, en tiempos de otrora, los cuerpos policiales del país estaban conformados en su mayoría por efectivos que habían cumplido con el servicio militar obligatorio, poseían su certificado de buena conducta, y tenían disciplina militar. La selección del personal era estricta, sobre todo en los aspectos vocacional, condiciones físicas y mental, así como demostrada solvencia moral en la comunidad. Por lo general los aspirantes tenían una formación académica de primaria, no obstante, los oficiales de formación policial eran bachilleres o con un mayor nivel educativo.
Al transcurrir el tiempo, se aperturaron con cierta autonomía académica, instituciones de formación policial como la Policía Metropolitana en la región Capital, y la Policía Municipal de Baruta, entre otras, con una estructura curricular que formaban en 4 años Licenciados en Ciencias y Artes Policiales, y TSU en policías en prevención del delito. Los resultados en sus funciones eran eficientes y reconocidos por las comunidades.
Ahora bien, los expertos y críticos en diseños curriculares sugieren que la formación básica de un aspirante a ser Policía debe tener conocimientos de asignaturas tales como: Legislación vigente y procedimientos legales, así como derechos humanos, normas de actuación en consonancia con las leyes, tener preparaciones en derecho penal, ética profesional, uso adecuado de fuerzas, educación ambiental, primeros auxilios, entre otras; sin dejar de mencionar la comunicación como herramienta para desarrollar habilidades verbales como escritos, para interactuar con las comunidades en la resolución de conflictos.
Estas materias representan solo una parte de la extensa gama, que se requiere para la formación académica teórica-practica que deben recibir los aspirantes a policía, por lo que demanda como mínimo 3 años de adiestramiento e instrucción. Cabe señalar, que durante el año 2009 fueron creadas La Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (UNES), ambas instituciones forman parte de un enfoque integral del gobierno hacia la seguridad y formación de cuerpos policiales. La estrategia incluye Los Cuadrantes de Paz como parte de un esfuerzo más amplio y estratégico para abordar la violencia y la inseguridad en coordinación con la comunidad en general.
Debo señalar, que la duración de la formación Policial para los aspirantes, específicamente para la PNB, generalmente oscila entre 9 y 12 meses, con la posición a optar por otras especialidades que pueden durar meses adicionales. El contexto señalado anteriormente, dejando claro que no tengo formación académica militar ni policial, tiene como propósito señalar la preocupación de la masificación de aspirantes y egresados en la formación policial en los municipios de la COL, en tiempos muy cortos, donde el incremento vertiginoso afecta significativamente el sistema educativo, así como el proceso de enseñanza y aprendizaje del aspirante.
Aunado a lo anterior expuesto, veo con preocupación que la matrícula masiva tiene un impacto negativo en la capacidad de las instituciones que no poseen espacios físicos disponibles adecuados, equipos y recursos necesarios, personal docente y administrativo que garanticen la calidad y eficiencia del efectivo. Esta situación planteada ha conllevado a las clases virtuales y a la improvisación de tareas. Las pocas supervisiones de los requisitos del aspirante son notorias para el ciudadano común. Es recomendable establecer convenios interinstitucionales para mejorar la formación integral. Finalmente quiero señalar que los gobiernos, en los tres niveles, debe tomar mayor interés en mejorar sustancialmente el salario de los miembros de los cuerpos policiales, dotándolos de viviendas y garantizándoles programas de salud integral legal permanente.
Ing. Luis Covis
Profesor Universitario
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