Internacionales.- El expresidente de Brasil, Fernando Collor de Mello, el primer mandatario electo popularmente en ese país tras la restauración de la democracia y condenado por corrupción, fue detenido este viernes por orden de la Corte Suprema.
Collor, de 75 años, fue arrestado en Maceió, en el estado de Alagoas (noreste), señaló bajo anonimato una fuente de la Policía brasileña.
Había sido condenado en 2023 a ocho años y diez meses de prisión por corrupción en una investigación derivada de la megacausa Lava Jato.
La policía lo detuvo “a las 4 de la mañana” cuando se disponía a viajar a Brasilia para cumplir la decisión judicial, dijo su defensa, según una nota citada por la prensa.
El expresidente (1990-1992) debe permanecer bajo custodia en Maceió “hasta decisión del STF”, Supremo Tribunal Federal, dijo la fuente policial. Medios locales afirman que deberá ser trasladado a la capital brasileña para comenzar el cumplimiento de su pena.
La justicia lo halló culpable de haber recibido 20 millones de reales (3,5 millones de dólares al cambio actual) cuando era senador entre 2010 y 2014 para “viabilizar irregularmente contratos” entre una constructora y una exfilial de la petrolera estatal brasileña Petrobras.
La orden de prisión fue lanzada por el juez Alexandre de Moraes del STF, y deberá ser refrendada por el plenario de la Corte. Moraes justificó su decisión al considerar que recursos presentados por la defensa de Collor contra la condena de 2023 eran “meramente dilatorios”.
Sus abogados recibieron el fallo “con sorpresa y preocupación”, según una nota enviada a la prensa.
Al ser el primer presidente elegido por sufragio universal después del régimen militar (1964-1985), Collor generó grandes expectativas al llegar al poder. Sin embargo, renunció a la Presidencia de la República en 1992 por denuncias que lo acusaban de cometer corrupción.
Tras renunciar a la presidencia en medio de protestas callejeras, Collor consiguió volver a la política en 2006, al ser elegido senador por Alagoas, un estado pobre del noreste. Ocupó ese escaño hasta 2022. Ese año apoyó a Bolsonaro en las elecciones.
Collor no es el único exmandatario brasileño en tener problemas con la justicia. Desde el fin de la dictadura militar (1964-1985), cuatro de los siete ocupantes del palacio presidencial de Planalto fueron en algún momento condenados, encarcelados o destituidos.
Jair Bolsonaro (2019-2022) está a las puertas de ser juzgado por una tentativa de golpe de Estado tras ser derrotado en las elecciones presidenciales del 2022 por el actual presidente Lula da Silva, cuando buscaba ser reelecto.
AFP