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EL EJERCICIO DE LA PROFESIÓN DE ABOGADO

por El Regional del Zulia
ALIRIO FIGUEROA

POR: DR. ALIRIO FIGUEROA ZAVALA. 

Individuo de número de la Academia de Ciencias Jurídicas del Estado Zulia. 

Mañana domingo 23 se celebra el Día Nacional del Abogado, he creído conveniente referirme al ejercicio de esta profesión ¿En qué consiste ejercer la profesión de la abogacía? Tradicionalmente se ha entendido como tal; la que realiza el abogado en representación de su cliente, es decir, al abogado que litiga. Este abogado litigante debe tener una preparación cónsona e idónea con la misión que debe cumplir.

También la profesión del abogado se puede ejercer en la forma siguiente: abogado asesor o consejero; abogado profesor y abogado magistrado.

ABOGADO ASESOR O CONSEJERO: Si bien es cierto que dentro de nuestra profesión, no siempre podemos decir que somos exclusivamente litigantes o exclusivamente consejeros, si es verdad que con alguna frecuencia desempeñamos una de estas funciones de manera preferente a la otra.

El abogado asesor o consejero, debe tener, los conocimientos y la preparación técnica del litigante y, además, reunir otros atributos que en su delicada función le son indispensable. Asesorar es aconsejar, orientar, y cuando no se tiene el espíritu en calma ni el alma en paz, la solución de los problemas aparece un tanto nebulosa; y de allí, que el abogado asesor debe ser una persona de una claridad de espíritu especial; debiendo estar en constante búsqueda de soluciones a los problemas planteados, ser investigador incansable y permanentemente informado.

ABOGADO PROFESOR: Este debe ser un maestro que disponga de los conocimientos del litigante y del asesor; pero a ello, debe aunar la imparcialidad, la serenidad y el desprendimiento que se requiere en tan noble papel de profesor.

ABOGADO MAGISTRADO: Así como se requieren condiciones especiales para ser litigantes, consejero o profesor; para impartir justicia entonces se requiere la sapiencia, la ilustración del litigante, el espíritu reposado del asesor, la madurez del profesor y espíritu de justicia y equidad.

 

Dr. Alirio Figueroa.

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