jueves, marzo 28, 2024
OPINIÓN

EL ENCARCELAMIENTO DE GUAIDÓ Y LA MATANZA A CUENTA GOTAS DE VENEZOLANOS EN COLOMBIA

POR: GIAN CARLO DI MARTINO

1.- Postrecitos de Huevos Chimbos:

* Analicen con detalle las maniobras de las mafias colombo-estadounidenses. Observen que   el gobierno de Colombia anunció la captura del narcotraficante más buscado del país, Dairo Antonio Úsuga, alias «Otoniel», líder del Clan del Golfo, por quien EEUU ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares, en el momento en que el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, dispensaba una visita a ese país. Obviamente fue un trofeo hecho para los gringos. Pero todo eso, como dije al principio, se trata de una jugarreta de capos que los obligó a sacrificar a uno de sus narcotraficantes, por cuanto, ¿ustedes creen que con esa captura bajará el negocio de la cocaína en Colombia, el ilegal tráfico hacia los EEUU? ¡Qué va! La DEA, como cartel de carteles, sigue activa traficando con las mafias colombianas encabezadas por Iván Duque.

* Así es que compite el presidente Nicolás Maduro. Por eso es que cuando los opositores terroristas se le colocan a un lado en la campaña de las megaelecciones del 21 de noviembre, parecen cucarachas pisadas. Se desesperan, no hallan qué dirección tomar.  Maduro informó al Presidente de la FIFA, Gianni Vicenzo Infantino, sobre la construcción del Centro Nacional de Fútbol, un moderno estadio que garantice el desarrollo del talento nacional, e igualmente anunció un plan de masificación de canchas, para los niños y niñas del país.

* La miseria humana no tiene parangón en la oposición terrorista venezolana. Guaidó agradeció al subpresidente de Colombia, Iván Duque, por entregarles la tarjeta de Permiso de Protección Temporal a los compatriotas que residen en ese país, con la que, aparentemente, solucionarán las irregularidades migratorias…Aquí pueden observar perfectamente la perversa jugada de ese canalla. Hace público su apoyo a esa información, con la velada intención de ocultar el escándalo del asesinato de venezolanos en Colombia, entre ellos dos niños, que implica directamente a Duque, y es lo verdaderamente repudiable. No le importa la vida de sus compatriotas.

* El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Seguridad, Josep Borrell, acusó a los opositores Leopoldo López y Juan Guaidó de querer “dinamitar” la misión de observación electoral que enviará el bloque a las megaelecciones. Siendo así, tenemos que decir que, al menos en este caso, prosperó la sensatez. Borrell siempre ha estado de parte de las medidas coercitivas y unilaterales que nos impusieron los gringos a petición de los golpistas Leopoldo López y Juan Guaidó, como medida de presión al pueblo, para derrocar al presidente Nicolás Maduro, sin embargo, aquí lo veo recular; le resultó imposible seguir justificando esas acciones colonialistas en pleno siglo XXI. De cualquier manera, el impasse fue superado.

* La hipocresía de la comunidad internacional. Los jefes de las bases militares gringas en Colombia, no ven las 250 mil hectáreas sembradas con hojas de coca en ese narcopaís. El presidente de la Asamblea Nacional, diputado Jorge Rodríguez, dijo: “es que Colombia produce la cocaína y Estados Unidos se la mete por la nariz. Es un gran negocio de más de 300 mil millones de dólares al año, dinero que está en los bancos e inmobiliarias de Norteamérica, en los bancos europeos, en los paraísos fiscales”, y yo agrego: en las madrigueras donde guardan el dinero sucio, el narcoparaco Iván Duque, su vicepresidenta y jefa de relaciones públicas del narcotráfico colombiano, Marta Lucía Ramírez, y casi toda esa oligarquía enquistada en el Palacio de Nariño.

2.- El encarcelamiento de Guaidó… Sé que, tras el secuestro y posterior extradición del diplomático venezolano Alex Saab, por parte de las autoridades de Cabo Verde a los Estados Unidos, muchísimos venezolanos y venezolanas, la mayoría, estoy seguro, quiere ver en prisión al ladrón Guaidó. Pero hay que hilar fino, porque los gringos y sus naciones satélites tienen como objetivo fundamental a) Destruir por completo las negociaciones que se desarrollan en México entre una delegación revolucionaria liderada por el diputado Jorge Rodríguez, y una pandilla encabezada por Gerardo Blyde, que representa a la oposición terrorista venezolana b) Evitar que se legitimen las megaelecciones del 21 de noviembre a través de unos comicios libres y transparentes con observación internacional…  El imperio gringo no quiere paz, desarrollo y progreso para Venezuela como un nación libre y soberana. Esos genocidas aspiran a utilizarnos de nuevo como proveedores de todas las riquezas que existen en nuestro suelo, para el despilfarro de su desastroso sistema capitalista. Por eso, hay que actuar con pies de plomo. No es fácil, porque tal como está la situación, tenemos libre a un golpista que se roba los activos de Venezuela en el exterior, y preso un diplomático que buscaba gasolina, alimentos y medicinas para la población venezolana en crisis. Pero, insisto, hay que actuar con mucha sindéresis. Es mucho lo que está en juego, tomando en cuenta que para la revolución lo primordial es el pueblo. Aclaro, por supuesto, que esto no quiere decir que estoy en contra de que haya justicia en el país, ¡por el contrario!, si tuviera en mis manos esa decisión, dictaminaba enviar a Guaidó a prisión, después de la juramentación de los candidatos ganadores de las megaelecciones, cuando ese desecho pestilente de la politiquería venezolana, pasaría a valer menos que un cero a la izquierda. 

3.- Los verdaderos responsables de la migración venezolana… Yo no culpo tanto al criminal Iván Duque del asesinato de los migrantes en Colombia, como a los canallas Julio Borges, Tomás Guanipa, y a todos los apátridas de la oposición terrorista nacional. De Duque sabemos que es un narcoparamilitar que tarde o temprano aplicaría sus métodos de exterminios en contra de nuestros connacionales en su país; pero que los mismos venezolanos se confabulen para dañar a su propia gente, no tiene perdón. Es inconcebible que no les duela su sangre. Duque es colombiano, no es nada de nosotros y nos odia a muerte. ¿Quién podría dudar entonces que esté detrás del asesinato de nuestros migrantes? Nadie. Observen que a esos niños venezolanos que mataron en Colombia, los asesinaron como las bandas paramilitares al servicio de ese bandido malogran a los líderes y lideresas sociales de su país. Dijo el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, que “los menores fueron retenidos tras ser acusados de hurto en un almacén: En el marco de la detención, los jóvenes fueron grabados atados y se observa a una persona de la comunidad manifestando que serían entregados a la Policía, para que no aparecieran muertos en la vía (..) Posteriormente, llegaron hasta el lugar hombres armados llevándose a los niños, quienes horas más tarde fueron encontrados ejecutados sobre la vía que conduce al municipio de El Tarra (Norte de Santander), sin vida, con impactos de arma de fuego y un cartel que decía Ladrones”. No se puede esperar menos de un criminal. Ese narcoparamilitar solo finge querer a los compatriotas en territorio santandereano cuando le envían grandes cantidades de dólares para que los proteja, y se los embolsilla. Nuestra vicepresidenta, Delcy Rodríguez, confirmó que Colombia recibió en un año 1.600 millones de dólares para atender a los migrantes, y se los robaron con total desparpajo. Sin embargo, con todo y eso, condeno más la raíz del problema, a los apátridas que promovieron la campaña de emigración. Los opositores terroristas nacionales, como venezolanos, deberían tener, aunque sea, un poco de compasión por sus connacionales. Y no es así. Utilizaron a los compatriotas como conejillos de india, como un experimento golpista que no funcionó y ahora nuestra gente en el exterior paga con la vida toda la xenofobia que esos bandidos estimularon.

4.- La matanza a cuenta gotas de venezolanos en Colombia…  Los apátridas criminales Julio Borges, Tomás Guanipa, Leopoldo López, Henrique Capriles Radonski, Manuel Rosales, Henry Ramos Allup, entre otros, promovieron la crisis en Venezuela, le pidieron de rodillas al psicópata Donald Trump que nos invadiera y nos aplicara las medidas coercitivas y unilaterales que contempla el perverso bloqueo financiero que afecta sobremanera a la población venezolana. Se apoderaron de los activos de Venezuela en el exterior, de Citgo en EEUU y Monómeros en Colombia, y así nos fueron cerrando los recursos hasta que lograron agudizar la crisis, mientras emprendían la campaña mediática incentivando a los compatriotas a que abandonaran el país, con el argumento de que fuera de nuestra patria tendrían mejor vida, cuando la realidad es que todo eso era solo un plan macabro, para derrocar el presidente Nicolás Maduro y tomar ellos el poder… Los medios de comunicación le dedicaban grandes reportajes escritos y audiovisuales a la gente marchándose por las fronteras, principalmente por la de Colombia. Algunos se quedaban en territorio santandereano, otros seguían a Ecuador, Chile, Perú, Panamá, México, EEUU, donde muchos presidentes promovieron la xenofobia, que provocaron y les siguen provocando el viacrucis que actualmente viven en el exterior. Pero el tiempo desenmascaró a los terroristas de la oposición, no lograron tumbar a Maduro, mientras el odio contra los migrantes, especialmente en Colombia, se desbordó al punto que son asesinados por las bandas paramilitares de Iván Duque. De allí que tenemos unas cifras de asesinatos de venezolanos en Colombia aterradoras. Nuestra vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, dijo que el Departamento de Medicina Legal de Colombia reportó que desde 2017 han asesinado 2.061, cifra que días después actualizó el presidente Maduro, quien calculó la mortandad a razón de dos fallecidos por día, sin tomar en cuenta más de 800 desapariciones forzosas, en fin, se ejecuta en tierras santandereanas una matanza a cuenta gotas de connacionales que atendieron a los llamados de López, Borges, Guanipa, Rosales, Capriles, Ramos Allup, entre otros. Y eso es lo más repudiable. 

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