El partido de Suu Kyi exige su liberación mientras los generales de Myanmar aprietan el control
(Reuters) – El partido de la líder electa detenida de Myanmar, Aung San Suu Kyi, pidió el martes su liberación inmediata y que la junta reconozca su victoria en las elecciones de noviembre, un día después de que un golpe militar provocara indignación mundial.
Estados Unidos amenazó con volver a imponer sanciones a los generales de Myanmar después de que tomaron el poder y arrestaron a Suu Kyi y a docenas de sus aliados en redadas matutinas el lunes.
El paradero de la noble laureada de la paz permaneció desconocido más de 24 horas después de su arresto y su única comunicación ha llegado en forma de una declaración escrita en anticipación al golpe de estado en la que se pide protestas contra la dictadura militar.
El Consejo de Seguridad de la ONU debía reunirse más tarde el martes, dijeron diplomáticos, en medio de llamados a una fuerte respuesta global a la última toma del poder por parte de los militares en un país arruinado durante décadas por el gobierno del ejército.
El golpe siguió a una victoria aplastante de la Liga Nacional para la Democracia (NLD) de Suu Kyi en las elecciones del 8 de noviembre, un resultado que los militares se han negado a aceptar citando acusaciones de fraude sin fundamento.
El ejército entregó el poder a su comandante, el general Min Aung Hlaing, e impuso el estado de emergencia durante un año, aplastando las esperanzas de que el país asolado por la pobreza, también conocido como Birmania, estuviera en el camino hacia una democracia estable.
El comité ejecutivo de la NLD exigió la liberación de todos los detenidos «lo antes posible».
