Portada » FRANCISCO

FRANCISCO

por Mileydi Piña
PEDDRO DUARTE OPINION

POR: DR. PEDRO DUARTE

El Papa Francisco ha sido una figura que ha resaltado la importancia de la humildad y la pobreza espiritual en el mundo moderno. A través de sus acciones y palabras, ha mostrado que la verdadera riqueza no se encuentra en lo material, sino en los valores espirituales y en el servicio a los demás.

En un mundo donde la búsqueda de riqueza material a menudo domina, el Papa nos recuerda que la verdadera satisfacción proviene de una vida dedicada a los demás, a la compasión y al amor al prójimo. Como él mismo ha dicho, «La pobreza no es un obstáculo para la felicidad, sino una oportunidad para compartir y crecer en el amor». Su ejemplo de vida, viviendo de manera sencilla y enfocándose en lo espiritual, nos invita a reflexionar sobre nuestras propias prioridades y a encontrar un equilibrio entre lo material y lo espiritual.
Su mensaje nos inspira a vivir con mayor humildad y a valorar lo que realmente importa en la vida.

El gran filosofo Sócrates haciendo referencia sobre la pobreza nos dice «El verdadero valor de un hombre no se mide por lo que tiene, sino por lo que es. La pobreza no es un obstáculo para la grandeza del espíritu, sino una oportunidad para encontrar la verdadera riqueza en el conocimiento y la virtud.»

El Cardenal Jorge Bergoglio, una vez elegido Papa escogió como nombre para su Pontificado, el de Francisco, inspirado en el ejemplo de un gran santo que se caracterizó por el desprendimiento de lo material, de las comodidades que le proporcionaba el ambiente donde fue criado y escogió como carisma la pobreza y un profundo amor a la naturaleza. Este santo, Francisco de Asís dentro de sus reflexiones manifestaba: «Es más bienaventurado dar que recibir», con insistencia hablaba sobre la simplicidad y la humildad, enfatizando la importancia de desprenderse de los bienes materiales para alcanzar una riqueza espiritual. Aunque no menciona directamente la «pobreza espiritual» o material, su vida y enseñanzas reflejan esa idea de vivir con lo esencial y encontrar valor en lo espiritual y esto fue lo que hizo con una profunda coherencia este gran Hombre que recién deja el plano terrenal.

Por su parte, el Papa Juan Pablo II llegó a plantear en una de sus tantas enseñanzas, que incluso debíamos dar hasta desde nuestra pobreza. Podemos preguntarnos ¿Cómo se logra este objetivo? Pues de muchas maneras, como por ejemplo: Ofreciendo nuestro tiempo y escuchar a quienes lo necesitan. Compartir conocimientos, si tenemos habilidades o conocimientos, compartirlos, esto enriquece a otros. Siendo solidarios y apoyando a quienes atraviesan dificultades, ofreciendo una mano amiga o un hombro en el que apoyarse. Pequeños gestos, como un simple acto de amabilidad o generosidad que puede marcar una gran diferencia en la vida de alguien. Lo importante es la intención y el corazón con el que damos.

En suma, en la riqueza espiritual encontramos la verdadera abundancia, pues es el alma la que se enriquece cuando compartimos desde el corazón.

 

«Lo que soy es el resultado de lo que he pensado. La riqueza material puede ser limitada, pero la riqueza del espíritu es infinita.»

 

Helen Keller

 

 

Dr. Pedro Duarte

Abogado

Te puede interesar

Copyright © 1990-2024 - Todos los derechos reservados.