Internacionales.- El huracán Beryl se agitaba amenazadoramente sobre Jamaica la tarde de este miércoles (03.07.2024) después de arrancar árboles y techos y causar destrucción a través de las islas del Caribe durante los últimos días.
El ciclón de categoría 4 impuso un estado de emergencia en la isla ante el temor de daños catastróficos.
Según el último boletín de la agencia meteorológica de Jamaica, están previstas precipitaciones totales de 100 a 200 milímetros (de cuatro a ocho pulgadas) y peligrosas marejadas ciclónicas que elevarán los niveles del agua hasta dos o tres metros.
Ante estos pronósticos y la advertencia del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de Estados Unidos de que el impacto de la pared del ojo del huracán será «significativo», el Gobierno de Jamaica declaró la isla zona de desastre durante los próximos siete días e impuso un toque de queda para esta jornada.
Los jamaicanos se preparaban para sufrir cortes de electricidad a última hora del miércoles, según un funcionario de la compañía eléctrica, mientras seguía lloviendo y los vientos se sentían sobre la capital, Kingston, en medio de reportes de carreteras costeras cortadas.
Al mediodía de este miércoles, el ojo bien definido del huracán se encontraba a unos 72 km (45 millas) al sureste de Kingston, según el NHC, aunque sus anillos exteriores ya estaban azotando gran parte de la isla de casi 3 millones de habitantes.
Beryl tiene vientos máximos sostenidos de 225 km/h y aunque se espera que se debilite un poco en próximos días, el NHC advirtió que el huracán se mantendrá con fuerza de huracán mayor mientras se dirige hacia las Islas Caimán.
Refugios preparados y fuerzas de seguridad movilizadas
La Oficina de Preparación para Desastres y Gestión de Emergencias (Odpem, en inglés) de Jamaica instó a la población que vive en zonas bajas y propensas a inundaciones a trasladarse a los refugios.
«Todos los refugios han sido activados», incluido el instalado en el Estadio Nacional, dijo el director general interino de la Odpem, Richard Thompson, cuyos últimos datos reportan unas 500 personas alojadas en los albergues.
Por su parte, el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, informó que una orden de evacuación está vigente para áreas propensas a inundaciones y deslizamientos de tierra, tanto aquellas situadas al nivel del mar como las cercanas a barrancos o vías fluviales.
Holness también indicó que las autoridades establecieron un operativo especial «para mantener el orden público» durante el paso de Beryl por el país caribeño, que tiene unos altos índices de delincuencia y homicidios.
«La Fuerza de Policía y la Fuerza de Defensa de Jamaica se movilizarán plenamente para mantener el orden público y ayudar en las tareas de socorro tras el huracán. Disponen de planes estratégicos para prevenir los saqueos y otros delitos durante este periodo», aseveró Holness en su cuenta de X.
Completa destrucción en dos islas de Granada
Beryl impactó a principios de esta semana en Granada, en cuyas islas de Carriacou y Pequeña Martinica «aproximadamente el 98 % de las estructuras están dañadas o destruidas», según el coordinador de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (Nadma, en inglés), Terence Walters.
Edificios públicos, casas y negocios privados se han visto seriamente afectados en estas islas, cuya agricultura y vegetación han quedado completamente devastadas.
El primer ministro de Granada, Dickon Mitchell, informó que el primer huracán de la temporada atlántica causó también «la total destrucción» de la red eléctrica y de la red de comunicaciones en Carriacou y Pequeña Martinica. (Agencias).