
Foto: Cabimas en El Tiempo
Especial.- Isabel Pineda, icono de la ciudad de Cabimas, falleció en su hogar ubicado en el sector Barrio Obrero, la tarde de este miércoles 1 de febrero a los 92 años de edad, por presentar problemas de salud.
Fue conocida en la ciudad, por ser una trabajadora incansable que vivió el ajetreo diario del centro por más de 60 años, ganándose la vida honradamente vendiendo los diferentes periódicos y revistas locales, regionales y nacionales en su kiosko, situado en la calle El Rosario con calle Colón del Casco Central de Cabimas, donde además se ganó el cariño de la gente, principalmente de quienes a diario visitaban su kiosko en el que podían localizar las diferentes revistas y periódicos de todo el país, así como también disfrutar de un café, cigarros y variedad de golosinas.
Desde las 4: 00 de la mañana se instalaba en la esquina de la calle El Rosario y desde esa hora peatones y transportistas se acercaban para comprar los periódicos del día.
Fue en su sitio de trabajo en el que se enteraba de situaciones que se generaban en el municipio, puesto que, varias personas se sentaban y comentaban en el kiosko, difertentes acontecimientos entre ellos, periodistas y comerciantes de la zona.

Isabel Pineda falleció a los 92 años de edad. Foto: Odarwi Polanco
Popularidad
Isabel, fue una persona muy pintoresca y se hizo merecedora de que la revista dominical de El Regional del Zulia «Coquivacoa», le realizara un trabajo especial de dos páginas destacando su trayectoria, trabajo y su popularidad en el municipio Cabimas.
Anécdotas
Se caracterizó por ser muy querida, respetada y abnegada en su trabajo, un personaje icono que deja huellas imborrables y anécdotas inolvidables tales como las peleas verbales que en muchas ocasiones sostenía con los encargados de las rutas que llegaban a entregarle los periódicos con cierto retraso, ya que, ella necesitaba tenerlos a la tiempo, para desde muy tempano trabajar en su butaca en la que permanecía desde las 4:00 de la mañana hasta lpasado el medio día que se regresaba a su hogar.
Entre otras anécdotas resalta la presencia en el kiosko de los estudiantes de LUZ, que mientras esperaban la ruta, realizaban tertulias en el tarantin degustando un rico café y revisando los diarios del día y a su vez platicando con Isabel.

Este es el kiosko donde Isabel laboró por más de 60 años de lunes a lunes. Foto: ERZ
La comerciante, trabajaba de lunes a lunes y en una entrevista manifestó que la única vez que faltó a su trabajo, fue cuando murió su esposo conocido como el Sr. Rosales, por su parecido con el gobernador del Zulia, de esa época.
Pese a tener un carácter fuerte, reflejaba tener muy buen sentido del humor como toda cabimense, contaba chistes y muchos empresarios se acercaban a sentarse, tomar un café y a comprar el periódico.
Con el pasar del tiempo por presentar problemas de salud y debido a la situación país se retiró de su kiosko, que estaba situado muy cerca del Plastiquero y Foto Vega.
Daniel Sandoval, vecino de la popular vendedora y visitante del kiosko, describió a Isabel como una mujer luchadora, madre de 4 hijos y afirmó que lamentablemente la situación del país generó que la carismática vendedora decidiera quedarse en su casa por no tener otras alternativas.

Daniel Sandoval. Foto: ERZ
Reiteró que desde muy temprano en la madrugada tomaba un carro por puesto, para dirigirse a su tarantin y aperturar a las 4:00 de la mañana. «Ella preparaba un café muy delicioso», comentó.
En Cabimas será recordada por siempre, la popular y pintoresca comerciante Isabel Pineda, que muy amablemente atendía a sus clientes en la esquina de la calle El Rosario del casco central, donde aún permanece el tarantin en el que comercializaba los periódicos y revistas del país.

Foto: Cabimas en El Tiempo

El kiosko permanece cerrado. Foto: ERZ

Foto: ERZ
Gayledys Barrientos
Fotos: ERZ
Fotos cortesía: Odarwi Polanco
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