LA VERDADERA ESENCIA DE LA NAVIDAD
POR: ABG. NILMARY BOSCAN MALDONADO
La navidad llega con entusiasmo y alegría para muchos, pero también con nostalgia para otros. En esta época de sentimientos encontrados es importante impregnarnos de la verdadera esencia de la navidad, que se manifiesta en el nacimiento de Jesús, un niño que llegó al mundo para redimirlo con su inmenso amor hacia la humanidad.
El termino navidad, significa “nacimiento” y es el momento para alimentar nuestro espíritu y que renazca en nuestros corazones la bondad, la inocencia y el perdón, recordando el nacimiento de Jesús, quien nació en un humilde pesebre rodeado de amor.
La época decembrina nos recuerda que la grandeza se encuentra en la humildad y que los mejores momentos están a simple vista en los pequeños detalles que la vida nos presenta cada día y que muchas veces pasan desapercibidos por vivir enfocados en aquello que no tenemos, sin tomar en consideración las cosas maravillosas que tenemos. Es momento de reflexionar y agradecer por todo lo que nos acompaña en el presente y que incluso podemos compartir con otros, desde un abrazo, una palabra de aliento hasta un regalo.
La navidad la disfrutamos por costumbre con fiestas, regalos y comida, pero nos invita primero a regocijarnos en el amor que podemos dar a los demás, a través de la generosidad, la unión, la compasión y la alegría, porque a pesar de las dificultades siempre hay que tener presente que para poder seguir, debemos levantarnos con la esperanza como bandera y la victoria asegurada a través de la fe.
Si queremos que nuestros hijos vivan la Navidad con un sentido verdadero debemos explicarles y enseñarles qué se esconde tras cada celebración. Recordamos el nacimiento de Jesús con alegría, sencillez y ternura.
Es momento de estar en familia, unidos y felices, practicar la solidaridad y el perdón. No hay navidad, sin amor a los demás. No hay navidad, si excluimos a los que no tienen nada, siendo indiferentes a la necesidad del otro, sin buscar el bien común. No hay navidad si existe discordia en la familia y no procuramos la reconciliación a través del perdón y la compasión. No hay navidad cuando nuestro espíritu está lleno de amargura y rencor, sin buscar la paz. La auténtica Navidad nos invita al amor desmesurado, a la compasión hacia el que sufre, a hacer todo lo posible por que cada día el mundo sea más humano y más justo para todos sin distinción alguna.
Disfruta la esencia de la navidad sintiendo y regalando amor.
Abg. Nilmary Boscan Maldonado
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