Salud.- Los problemas psicológicos en adolescentes, especialmente en varones, han sido objeto de estudio en los últimos años. Factores como la presión social, el rendimiento académico, el uso excesivo de redes sociales y la falta de comunicación en el hogar pueden contribuir a la ansiedad, la depresión y el aislamiento de la población juvenil.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), publicó que uno de cada siete jóvenes entre 10 y 19 años padece algún tipo de trastorno mental, y el suicidio es la tercera causa de muerte en personas de 15 a 29 años. La adolescencia es una etapa de cambios físicos, emocionales y sociales, y la imposición de normas de género puede aumentar la disparidad entre la realidad que viven y sus expectativas, afectando su bienestar mental.
Para abordar este tema, se han implementado diversas estrategias, como programas escolares de prevención, redes de apoyo y acceso a terapia psicológica. La promoción del bienestar y la intervención temprana son clave para mejorar la calidad de vida de los jóvenes.
Sin embargo en un reporte de la periodista Katty Kay, corresponsal especial de la BBC en EE.UU, publicado a finales de mayo de este año, se afirma con mucha preocupación que los hombres jóvenes están pasando por dificultades psicológicas y económicas, que los colocan en desventaja en cuanto a su desarrollo humano en comparación con las mujeres jóvenes, ya que hay suficientes estadísticas sobre rendimiento académico, niveles de ingresos, soledad, incluso falta de sexo, que indican que los chicos no están nada bien.
¿Qué está pasando con los hombres jóvenes?
Kay consultó a Scott Galloway, un profesor de la Universidad de Nueva York que en los últimos años está tratando de llevar el debate a un terreno más positivo, tanto para los jóvenes como para las jóvenes; sobre qué está pasando con los hombres jóvenes y cómo esto afecta a las vidas de las mujeres.
Galloway, que es presentador de varios podcasts, entre ellos Lost Boys («Chicos perdidos»), que se estrenó en mayo, y pronto publicará un nuevo libro titulado Notes on Being a Man («Apuntes sobre ser hombre»), destaca que hay que prestar mucha atención a este nuevo problema que enfrenta la juventud.
En relación al por qué se centra en los hombres y cuál es, en su opinión, la crisis de salud mental y física que están viviendo los jóvenes varones, el profesor Gallowat aseguró que los datos son abrumadores: cuatro veces más probabilidades de suicidarse, tres veces más probabilidades de ser adictos, 12 veces más probabilidades de ser encarcelados, niveles récord de depresión.
Expreso además, “estamos criando a la generación más obesa, ansiosa y deprimida de la historia. Por primera vez, a una persona de 30 años no le va tan bien como a sus padres a los 30. En los centros urbanos, las mujeres menores de 30 ganan más dinero que los hombres. También más viviendas unifamiliares en propiedad de mujeres que de hombres”.
Aunque la soledad es un problema para ambos géneros, parece ser especialmente dura para un hombre joven.
“Las mujeres tienden a canalizar parte de esa energía romántica, si no la tienen en una relación, hacia sus amistades y su carrera profesional, mientras que los hombres tienden a canalizarla hacia cosas como los videojuegos o el porno, o empiezan a aislarse de la sociedad. Así que estamos ante un grupo de hombres jóvenes inviables emocional y económicamente.
Un tercio de las mujeres estadounidenses ganan ahora más que sus parejas. ¿Qué significa para las parejas enfrentar una situación en la que a las mujeres les va mejor, ganan más, reciben más educación, mientras que los hombres se quedan atrás? Que los hombres no han seguido el ritmo en lo que respecta a hacerse cargo de las tareas pendientes.
Podría pensarse que, si no aportan tanto económicamente, ¿lo hacen emocional, logística o domésticamente? Indicó Galloway que la realidad es que la contribución del hombre a la relación, en general, no ha seguido el ritmo de aumento de la contribución de la mujer.
“Aho las mujeres están haciendo cuentas y diciendo, no estoy sacando mucho de esto. Dos tercios de las mujeres menores de 30 años tienen novio; en cambio uno de cada tres hombres tiene una relación. Las mujeres están saliendo con hombres mayores porque quieren hombres más viables económica y emocionalmente”, explicó.
¿Las mujeres progresistas no funcionan para los hombres?
Para Galloway en el caso de que se pensara que las mujeres independientes económicamente no funcionarían para los hombres, por considerarlos inviables económicamente, “creo que no debemos hacer nada para impedir que las mujeres sean económicamente independientes y estas no deberían tener que rebajar su nivel de exigencia, al contrario deberían cosechar las recompensas de sus duras victorias, del hecho de que trabajen más, de que tengan una mejor función ejecutiva, de que les vaya bien en la escuela y adapten sus habilidades a una economía de la era de la información”.
Al mismo tiempo, hay una serie de programas que deberían elevar el nivel de los jóvenes en general y crear una mayor viabilidad económica, de modo que, si dos personas se juntan, sean económicamente viables como pareja integral.
Beber más
También cree Galloway, que los jóvenes necesitan beber más. “Hay un movimiento antialcohol que ha conseguido mucha aceptación en varios países. Por ejemplo, el 40% de los clubes nocturnos de Londres han cerrado, porque los jóvenes no tienen dinero y hay un movimiento antialcohol. Creo que el riesgo que supone el alcohol para el hígado de los jóvenes de 25 años es insignificante al lado del riesgo de ansiedad y aislamiento social”.
“Mi consejo para los jóvenes –y lo digo con cierto humor–es que salgan más de casa, beban más y tomen una serie de malas decisiones que quizá les salgan bien”.
Redefinir el concepto de proveedor y protector
– Me gustaría pensar que los hombres jóvenes, si así lo desean, podrían realmente adoptar una noción de masculinidad que los guíe en las miles de decisiones que tienen que tomar cada día personal y profesionalmente; pero debemos definirla aspiracionalmente, por lo que deben componer tres pilares fundamentales: proveedor, protector y procreador.
-Como proveedor, todo hombre, al comenzar su carrera en una sociedad capitalista, debería asumir o aspirar a asumir la responsabilidad económica de su hogar, aunque signifique darse cuenta de que tu pareja es mejor en esto del dinero y apoyarla más en su carrera.
-La dura realidad es, y nos resistimos a admitirla, que las mujeres se sienten menos atraídas sexualmente por los hombres cuando estos pierden su viabilidad económica.
-En cuanto a ser protector, debería ser tu mecanismo por defecto como hombre. Los hombres necesitan ser fuertes, protectores.
-La procreación, que es el deseo sexual, el deseo de encontrar pareja, si se canaliza correctamente, puede ser una motivación fantástica y un medio para ser un mejor hombre.
-El objetivo es que puedas establecer relaciones profundas y significativas. Y la mayoría de la gente diría que las relaciones más profundas y significativas que tienen son las que se han forjado al encontrar pareja y tener sus hijos.
-El 60% de las personas de 30 años tenía un hijo en casa hace 40 años. Ahora es el 27%.
Prosperidad injusta
Adicionó el profesor Galloway que su generación vivió una prosperidad enormemente injusta. Así que es comprensible que la gente diga: «Vale, llevas 3.000 años de ventaja, y ahora te pones nervioso cuando a los hombres no les va bien».
Destacó que si vas a una morgue y hay cinco personas que se suicidaron, cuatro son hombres. “¿Y saben quién quiere que haya más hombres económica y emocionalmente viables? Las mujeres. Las mujeres no van a seguir prosperando a menos que tengamos más hombres viables”.
Las mujeres aún enfrentan enormes desafíos, pero también podemos reconocer que nuestros hombres jóvenes están en apuros y necesitan ayuda urgente.
