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PJ: “Nuestra propuesta por la vida y la libertad busca recuperar la democracia en Venezuela”

CARACAS. El partido Primero Justicia en rueda de prensa a través de la plataforma Zoom, explicó al país la propuesta por la vida y la libertad, como, según indican en el comunicado oficial, primer paso para alcanzar el objetivo fi­nal de recuperar la democracia en Venezuela.  

En tal sentido el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Juan Pablo Guanipa, y quien tuvo la responsabilidad de abrir las intervenciones, dijo que dicha propuesta se dirige, en sintonía con la propuesta del Gobierno de Emergencia Nacional, a dar solución integral y defi­nitiva a las causas de la crisis venezolana.

“Debemos hacer frente a la pandemia y atacar las causas políticas del sufrimiento de los venezolanos. Los derechos humanos son indivisibles y debemos rescatarlos todos, desde el derecho a la vida hasta el derecho a la democracia”, explicó el parlamentario.

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En este orden, Carlos Ocariz, dirigente de esta tolda política, explicó los aspectos que se incluyen en dicha propuesta y resaltó que todos buscan apoyar a Venezuela en este caos provocado por el régimen de Maduro, el cual ha ocasionado destrucción y desesperación en todo el pueblo venezolano.

“Son 5 los aspectos que contempla esta propuesta, a saber: Exigencia de dotación de equipos de bioseguridad a los profesionales de la salud e involucrados en la pandemia, así como la compra de sufi­cientes pruebas de PCR para la detección de la covid-19. Desarrollo del programa 100 dólares al cien por ciento, de manera que cada familia venezolana reciba la transferencia de 100 dólares para mitigar los efectos económicos derivados del COVID-19. Creación del Fondo por la vida para atender a pequeños y medianos comerciantes y a trabajadores de la economía informal. Designación de un nuevo CNE en el seno de la Asamblea Nacional presidida por Juan Guaidó, verificación de todas las condiciones que garanticen procesos electorales transparentes. Por último la garantía plena de los derechos humanos, especialmente del derecho a la protesta pacífi­ca y del derecho a la libertad de expresión”, dijo Ocariz en su derecho de palabra.

Henrique Capriles Radonski, dirigente por Primero Justicia dijo además que el partido justiciero demanda un conjunto de garantías indispensables que permitan su viabilidad y aseguren la transparencia y efectividad de su ejecución.

En tal sentido dijo que “solicitamos la liberación de todos los presos políticos, el cierre de casos judiciales para que retornen los exiliados, así como el cese de la persecución y represión a la sociedad en general. La incorporación de la Iglesia como garante de los procesos para la materialización de esta propuesta. Que los recursos no sean administrados por Nicolás Maduro. Restablecimiento pleno de las atribuciones constitucionales de la Asamblea Nacional. Establecer el compromiso de no realizar ningún manejo político-partidista de la pandemia y crear un mecanismo, con el apoyo de la Iglesia. El plan nacional para la pandemia de la covid-19 debe ser aprobado en la Asamblea Nacional presidida por Juan Guaidó. Y la presencia permanente en Venezuela de organismos internacionales especializados en la garantía y defensa de los derechos humanos”.

Para concluir convocaron a todos los sectores de la sociedad venezolana y al Frente Amplio Venezuela Libre a intensi­ficar mecanismos de presión en defensa de los derechos humanos y de la libertad de Venezuela que sufre una tragedia humanitaria sin precedentes.

“Tenemos que recuperar la esperanza de vivir en un país con justicia y paz, con calidad de vida y sin discriminaciones políticas. Urge tomar el camino del cambio que conduzca a la Venezuela del progreso, dejando atrás las ideologías del odio y de la división.

PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD

 Los venezolanos estamos viviendo el colapso de nuestro país. Somos un pueblo sometido a salarios de hambre, sin servicios públicos, sin gasolina y sin posibilidades de progresar. Esto ha forzado la huida de más de cinco millones de personas del país, el éxodo más grande de la región y el segundo del mundo después de Siria. Y a todo ello se suman los peligros que representa la covid-19 para la vida de los venezolanos. Es moralmente inaceptable que continuemos viviendo esta situación. En Primero Justicia aspiramos a un cambio integral y hacemos nuestras las palabras expresadas por la Conferencia Episcopal Venezolana, el 28 de mayo de 2020, al señalar que “debemos comprender no solo los síntomas, sino sus causas económicas, políticas y sociales; no debemos reducirnos a aliviar los efectos, sino acompañar y alentar los procesos para que se den las transformaciones y los cambios necesarios a nivel político, social y económico”. Por eso, estamos obligados a plantearle al país una ruta clara para poner ­n a la tragedia humanitaria que tiene como responsable al régimen de Nicolás Maduro. Hoy presentamos al país la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD, como primer paso para alcanzar el objetivo ­nal de recuperar la democracia. Esta se dirige –en sintonía con propuesta del Gobierno de Emergencia Nacional– a dar solución integral y de­nitiva a las causas de la crisis venezolana. Debemos hacer frente a la pandemia y, en paralelo, atacar las causas políticas del sufrimiento de los venezolanos. Los derechos humanos son indivisibles y debemos rescatarlos todos, desde el derecho a la vida hasta el derecho a la democracia. La PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD abarca los siguientes aspectos: Exigencia de dotación de equipos de bioseguridad a los profesionales de la salud e involucrados en la pandemia, así como la compra de su­cientes pruebas de PCR para la detección de la covid-19. Urge trabajar para ampliar y recuperar la infraestructura hospitalaria y el equipamiento médico para nuestros centros de salud, así como coordinar todos los apoyos humanitarios necesarios para atender la crisis de la covid-19. Desarrollo del programa 100 dólares al cien por ciento, de manera que cada familia venezolana reciba la transferencia de 100 dólares para mitigar los efectos económicos derivados del COVID-19. Creación del Fondo por la vida para atender a pequeños y medianos comerciantes y a trabajadores de la economía informal. Designacion de un nuevo CNE en el seno de la Asamblea Nacional presidida por Juan Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, a los ­nes de acompañar la implementación de la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD. Finalmente, convocamos a todos los sectores de la sociedad venezolana y al Frente Amplio Venezuela Libre a intensi­car, unidos, mecanismos de presión en defensa de los derechos humanos y de la libertad de un pueblo que sufre las consecuencias de esta tragedia humanitaria. Tenemos que recuperar la esperanza de vivir en un país con justicia y paz, con calidad de vida y sin discriminaciones políticas. Urge tomar el camino del cambio que conduzca a la Venezuela del progreso, dejando atrás las ideologías del odio y de la división. En Caracas, a los cuatro (4) días del mes de junio de 2020. Guaidó, veri­cación de todas las condiciones que garanticen procesos electorales transparentes, además del establecimiento de un cronograma electoral para que los venezolanos podamos votar en elecciones presidenciales y parlamentarias que sean libres y competitivas. Garantía plena de los derechos humanos, especialmente del derecho a la protesta pací­ca y del derecho a la libertad de expresión. En el marco de esta PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD, demandamos un conjunto de garantías indispensables que permitan su viabilidad y aseguren la transparencia y efectividad de su ejecución. Se trata de exigencias fundamentales para impedir que se repitan experiencias anteriores de frustración y mentira: La liberación de todos los presos políticos (civiles y militares), quienes corren riesgo cierto de contagio de la covid-19, el cierre de casos judiciales que permita el retorno de los exiliados, así como el cese de la persecución y represión a la sociedad en general. La incorporación de la Iglesia como garante de los procesos para la materialización de la presente propuesta. Ningún recurso que se obtenga para materializar estas propuestas podrá ser administrado por Nicolás Maduro y su régimen; tampoco por ninguna institución política o del Estado. Restablecimiento pleno de las atribuciones constitucionales de la Asamblea Nacional. Establecimiento de un marco institucional para que, en los términos del artículo 328 de la Constitución, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana colabore y haga seguimiento a la implementación de las propuestas aquí planteadas, en conjunto con otras instituciones del Estado, la Iglesia y los organismos internacionales. Establecer el compromiso de no realizar ningún manejo político-partidista de la pandemia y crear un mecanismo, con el apoyo de la Iglesia, para garantizar que los bene­cios lleguen a todos los venezolanos, sin discriminaciones. El plan nacional para la pandemia de la covid-19 debe ser aprobado en la Asamblea Nacional presidida por Juan Guaidó, en la sede del Palacio Federal Legislativo, con el voto de las 2/3 partes de sus miembros, de modo que se legitime un acuerdo político amplio en favor de la vida de los venezolanos. La presencia permanente en Venezuela de organismos internacionales especializados en la garantía y defensa de los derechos humanos, especialmente de la O­cina de la Alta PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD Los venezolanos estamos viviendo el colapso de nuestro país. Somos un pueblo sometido a salarios de hambre, sin servicios públicos, sin gasolina y sin posibilidades de progresar. Esto ha forzado la huida de más de cinco millones de personas del país, el éxodo más grande de la región y el segundo del mundo después de Siria. Y a todo ello se suman los peligros que representa la covid-19 para la vida de los venezolanos. Es moralmente inaceptable que continuemos viviendo esta situación. En Primero Justicia aspiramos a un cambio integral y hacemos nuestras las palabras expresadas por la Conferencia Episcopal Venezolana, el 28 de mayo de 2020, al señalar que “debemos comprender no solo los síntomas, sino sus causas económicas, políticas y sociales; no debemos reducirnos a aliviar los efectos, sino acompañar y alentar los procesos para que se den las transformaciones y los cambios necesarios a nivel político, social y económico”. Por eso, estamos obligados a plantearle al país una ruta clara para poner ­n a la tragedia humanitaria que tiene como responsable al régimen de Nicolás Maduro. Hoy presentamos al país la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD, como primer paso para alcanzar el objetivo ­nal de recuperar la democracia. Esta se dirige –en sintonía con propuesta del Gobierno de Emergencia Nacional– a dar solución integral y de­nitiva a las causas de la crisis venezolana. Debemos hacer frente a la pandemia y, en paralelo, atacar las causas políticas del sufrimiento de los venezolanos. Los derechos humanos son indivisibles y debemos rescatarlos todos, desde el derecho a la vida hasta el derecho a la democracia. La PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD abarca los siguientes aspectos: Exigencia de dotación de equipos de bioseguridad a los profesionales de la salud e involucrados en la pandemia, así como la compra de su­cientes pruebas de PCR para la detección de la covid-19. Urge trabajar para ampliar y recuperar la infraestructura hospitalaria y el equipamiento médico para nuestros centros de salud, así como coordinar todos los apoyos humanitarios necesarios para atender la crisis de la covid-19. Desarrollo del programa 100 dólares al cien por ciento, de manera que cada familia venezolana reciba la transferencia de 100 dólares para mitigar los efectos económicos derivados del COVID-19. Creación del Fondo por la vida para atender a pequeños y medianos comerciantes y a trabajadores de la economía informal. Designacion de un nuevo CNE en el seno de la Asamblea Nacional presidida por Juan Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, a los ­nes de acompañar la implementación de la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD. Finalmente, convocamos a todos los sectores de la sociedad venezolana y al Frente Amplio Venezuela Libre a intensi­car, unidos, mecanismos de presión en defensa de los derechos humanos y de la libertad de un pueblo que sufre las consecuencias de esta tragedia humanitaria. Tenemos que recuperar la esperanza de vivir en un país con justicia y paz, con calidad de vida y sin discriminaciones políticas. Urge tomar el camino del cambio que conduzca a la Venezuela del progreso, dejando atrás las ideologías del odio y de la división. En Caracas, a los cuatro (4) días del mes de junio de 2020. Guaidó, veri­cación de todas las condiciones que garanticen procesos electorales transparentes, además del establecimiento de un cronograma electoral para que los venezolanos podamos votar en elecciones presidenciales y parlamentarias que sean libres y competitivas. Garantía plena de los derechos humanos, especialmente del derecho a la protesta pací­ca y del derecho a la libertad de expresión. En el marco de esta PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD, demandamos un conjunto de garantías indispensables que permitan su viabilidad y aseguren la transparencia y efectividad de su ejecución. Se trata de exigencias fundamentales para impedir que se repitan experiencias anteriores de frustración y mentira: La liberación de todos los presos políticos (civiles y militares), quienes corren riesgo cierto de contagio de la covid-19, el cierre de casos judiciales que permita el retorno de los exiliados, así como el cese de la persecución y represión a la sociedad en general. La incorporación de la Iglesia como garante de los procesos para la materialización de la presente propuesta. Ningún recurso que se obtenga para materializar estas propuestas podrá ser administrado por Nicolás Maduro y su régimen; tampoco por ninguna institución política o del Estado. Restablecimiento pleno de las atribuciones constitucionales de la Asamblea Nacional. Establecimiento de un marco institucional para que, en los términos del artículo 328 de la Constitución, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana colabore y haga seguimiento a la implementación de las propuestas aquí planteadas, en conjunto con otras instituciones del Estado, la Iglesia y los organismos internacionales. Establecer el compromiso de no realizar ningún manejo político-partidista de la pandemia y crear un mecanismo, con el apoyo de la Iglesia, para garantizar que los bene­cios lleguen a todos los venezolanos, sin discriminaciones. El plan nacional para la pandemia de la covid-19 debe ser aprobado en la Asamblea Nacional presidida por Juan Guaidó, en la sede del Palacio Federal Legislativo, con el voto de las 2/3 partes de sus miembros, de modo que se legitime un acuerdo político amplio en favor de la vida de los venezolanos. La presencia permanente en Venezuela de organismos internacionales especializados en la garantía y defensa de los derechos humanos, especialmente de la O­cina de la Alta PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD Los venezolanos estamos viviendo el colapso de nuestro país. Somos un pueblo sometido a salarios de hambre, sin servicios públicos, sin gasolina y sin posibilidades de progresar. Esto ha forzado la huida de más de cinco millones de personas del país, el éxodo más grande de la región y el segundo del mundo después de Siria. Y a todo ello se suman los peligros que representa la covid-19 para la vida de los venezolanos. Es moralmente inaceptable que continuemos viviendo esta situación. En Primero Justicia aspiramos a un cambio integral y hacemos nuestras las palabras expresadas por la Conferencia Episcopal Venezolana, el 28 de mayo de 2020, al señalar que “debemos comprender no solo los síntomas, sino sus causas económicas, políticas y sociales; no debemos reducirnos a aliviar los efectos, sino acompañar y alentar los procesos para que se den las transformaciones y los cambios necesarios a nivel político, social y económico”. Por eso, estamos obligados a plantearle al país una ruta clara para poner ­n a la tragedia humanitaria que tiene como responsable al régimen de Nicolás Maduro. Hoy presentamos al país la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD, como primer paso para alcanzar el objetivo ­nal de recuperar la democracia. Esta se dirige –en sintonía con propuesta del Gobierno de Emergencia Nacional– a dar solución integral y de­nitiva a las causas de la crisis venezolana. Debemos hacer frente a la pandemia y, en paralelo, atacar las causas políticas del sufrimiento de los venezolanos. Los derechos humanos son indivisibles y debemos rescatarlos todos, desde el derecho a la vida hasta el derecho a la democracia. La PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD abarca los siguientes aspectos: Exigencia de dotación de equipos de bioseguridad a los profesionales de la salud e involucrados en la pandemia, así como la compra de su­cientes pruebas de PCR para la detección de la covid-19. Urge trabajar para ampliar y recuperar la infraestructura hospitalaria y el equipamiento médico para nuestros centros de salud, así como coordinar todos los apoyos humanitarios necesarios para atender la crisis de la covid-19. Desarrollo del programa 100 dólares al cien por ciento, de manera que cada familia venezolana reciba la transferencia de 100 dólares para mitigar los efectos económicos derivados del COVID-19. Creación del Fondo por la vida para atender a pequeños y medianos comerciantes y a trabajadores de la economía informal. Designacion de un nuevo CNE en el seno de la Asamblea Nacional presidida por Juan Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, a los ­nes de acompañar la implementación de la PROPUESTA POR LA VIDA Y LA LIBERTAD. Finalmente, convocamos a todos los sectores de la sociedad venezolana y al Frente Amplio Venezuela Libre a intensi­car, unidos, mecanismos de presión en defensa de los derechos humanos y de la libertad de un pueblo que sufre las consecuencias de esta tragedia humanitaria. Tenemos que recuperar la esperanza de vivir en un país con justicia y paz, con calidad de vida y sin discriminaciones políticas. Urge tomar el camino del cambio que conduzca a la Venezuela del progreso, dejando atrás las ideologías del odio y de la división. En Caracas, a los cuatro (4) días del mes de junio de 2020.

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