POR: DR. ALIRIO FIGUEROA ZAVALA
Individuo de número de la Academia de Ciencias Jurídicas del Estado Zulia.
El problema monetario y las sucesivas devaluaciones del bolívar frente al dólar estadounidense, son asuntos, que no solamente son importantes para los economistas, sino para la población en general.
En el país, aparte del bolívar, se está utilizando el dólar americano. A este respecto, conviene precisar que, la vigente Constitución Nacional consagra en su artículo 318, que la unidad monetaria del país es el bolívar y, en el caso que se instituya una moneda común en el marco de la integración latinoamericana y caribeña, podrá adoptarse la moneda que sea objeto de un tratado que suscriba la república.
Esto no está ocurriendo en el país sino todo lo contrario, porque como ya exprese anteriormente, la moneda que circula más que el bolívar, es el dólar de los Estados Unidos de América. Desde el punto de vista estrictamente constitucional no es legal; y que sepamos, Venezuela no ha suscrito ningún tratado que indique que pueda adoptarse como moneda el dólar americano.
En Latinoamérica los únicos países que están dolarizados son Ecuador y El Salvador, los demás tienen su propia moneda. Lo que está ocurriendo en Venezuela es una dolarización de hecho.
Sobre el tema de la dolarización existen opiniones que si bien no las rechazan, señalan que no tiene el poder real de resolver definitivamente el problema económico, porque la realidad es que los gobiernos de los países Latinoamericanos, no tienen su origen en la moneda, ya que el problema de fondo es que gastan más dinero del que consiguen para alimentar y sostener gigantescas nóminas de empleados públicos, muchas veces incurriendo también en corrupción administrativa.
El problema entonces, es el déficit fiscal, valga decir, se gasta más dinero del que se consigue. Si bien es cierto que con la dolarización al inicio se siente un alivio, porque los precios comienzan a crecer más despacio y bajan las tasas de interés, pero luego, como el problema de fondo, es el despilfarro continuo del dinero, seguirá el endeudamiento del gobierno y de nuevo la perdida de la confianza de los acreedores.
Si se adopta la dolarización, pudiera ser peor, ya que el país no tendrá normas de controlar la economía, como lo es la política monetaria, valga decir, no podrá aumentar la cantidad de dinero en circulación cuando necesite estimular el crecimiento, ni podrá disminuir dicha cantidad cuando necesite frenar el crecimiento de los precios.
Para las economías latinoamericanas que siempre viven en crisis es preferible contar con el mayor número de instrumentos posibles de políticas económicas para adaptarse a las condiciones de cada momento, y uno de esos instrumentos es la moneda. Los países que dolaricen su economía pueden quedar expuestos a las decisiones de los Estados Unidos de América y las situaciones inesperadas que afecten la economía de ese país.
De manera que el país que adoptó el dólar puede verse afectado, ya que el Sistema de la Reserva Federal de USA actúa en funciones de las necesidades de su país y no en beneficio de otro país que haya decidido aplicar la dolarización de su moneda.
Dr. Alirio Figueroa Zavala | Abogado
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