DEPORTES.- Una competencia como la Eurocopa 2024 se ha visto empañada por la política. El defensor turco Merih Demiral festejó el segundo gol que convirtió en el partido ante Austria con un gesto asociado con la ultra derecha turca y desató una tormenta donde se habló de fascismo y xenofobia, en vez de fútbol.
Las autoridades alemanas, anfitrionas de esta Eurocopa 2024 no dejaron pasar este detalle y la cancillería citó a diplomáticos turcos y alemanes para tratar el tema. Asimismo, le valió una sanción de la UEFA y no podrá jugar en los próximos dos partidos del torneo.
El gesto de Demiral asociada a la organización “Lobos Grises”, tiene una connotación que los europeos no están dispuestos a pasar alto, por estar ligado al fascismo y la xenofobia.
Los Lobos Grises, son una organización racista y xenófoba de la ultraderecha nacionalista turca, que está ligada al Partido del Movimiento Nacional, fundado por Alparslan Türkes en 1961.
Por ese gesto del jugador Demiral la UEFA abrió un expediente y el gobierno alemán citó al embajador turco para pedirle explicaciones. La ministra del interior de Alemania, Nancy Faeser, pidió a la UEFA que castigue al jugador.
“Los símbolos de la ultraderecha extremista turca no tienen lugar en nuestros estadios. Utilizar al Campeonato Europeo como plataforma para el racismo es inaceptable”, dijo.
Demiral se quiso despegar del grave incidente que desencadenó su festejo, y declaró que solo se trataba de una expresión inocente de orgullo nacional y que «no hay ningún mensaje escondido o nada parecido».
Con información diariouno.com
Foto Cortesía/EFE
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