ZARABANDA DE APAGONES
POR: EMIRO ALBORNOZ LEÓN
Periodista-Asesor
Lo que hemos presenciado los venezolanos en este reciente fin de semana, es una verdadera fiesta de apagones que se han sucedido a lo largo y ancho del país. No se trata de nada distinto de lo que ha acontecido en Venezuela desde aquel gran apagón nacional devenido en abril del 2009.
Una rápida cuenta de suma nos da un total de trece años, largos, de sufrimiento, de atraso y de ruinas para el país y para los venezolanos.
Entonces era Presidente ese atormentado ser que respondía al nombre de Hugo Chávez , quien hoy día no es más que un mal recuerdo para los venezolanos, pero cuyos seguidores, muy pocos ya, intentan mantener vivo en el tiempo, pero es una misión imposible porque si en algo estamos de acuerdo todos es que el desastre que ha arruinado a Venezuela y obligado a cerca de siete millones de compatriotas a huir del país, comenzó con Hugo Rafael y lo continuó su aventajado alumno en eso de hacer muy mal las cosas, Nicolás Maduro.
Ayer, como hoy, ni Chávez ni Maduro admiten su absoluta responsabilidad en el colapso eléctrico y buscaba y busca afanosamente evadirse del problema ubicando culpables en un presunto sabotaje de los Estados Unidos, de la oposición, de los colombianos, de la sequía del Gurí. A esta última dejaron de apelar cuando el Gurí se puso a reventar y los apagones andaban en una especie de zarabanda como aquellos aquelarres de la edad media. Las excusas van y vienen.
Revisando la vigente Ley Eléctrica que data del 14 de diciembre de 2010 dice que el acceso a la electricidad es un derecho humano», pues éste se ha venido vulnerando una y otra vez, en sucesiones de tiempo interminables. Y hurgando en las páginas de ese señor que lo sabe todo y nada oculta (google) nos encontramos con estas aterradoras situaciones ocasionadas por la marabunta revolucionaria. “En septiembre de 2015 murieron siete bebés prematuros en el Hospital Universitario Dr. Luis Razzetti de Barcelona, estado Anzoátegui, por causa de una prolongada falla eléctrica. Un caso análogo ocurrió en el Pediátrico Menca De Leoni, el 14 de febrero de 2018, en Guayana, donde la falla eléctrica duró cuatro horas, la planta eléctrica del Pediátrico no funcionó y por lo tanto «fallaron las presiones del aire comprimido y del oxígeno, y el saldo fue de seis recién nacidos muertos».
En el hospital Universitario de Maracaibo, un ciudadano colombiano a quien le iban a trasplantar un riñón que por tanto tiempo había esperado por un donante, un apagón hizo suspender la intervención quirúrgica q ya estaba en marcha y no hubo más remedio que cerrarlo con la lamentable pérdida del órgano porque la institución de salud no contaba, con la planta eléctrica que debe funcionar obligatoriamente cuando se presentan estos eventos. Señores, esos son crímenes de lesa humanidad, y tendrán que responder por ellos
Lo cierto, estimados y sufridos lectores, que este grave problema, como los otros que ha traído consigo este desastroso e irresponsable régimen que ya no sé si calificarlo de comunista porque la camarilla que gobierna vive la vida loca en medio del capitalismo más salvaje y para quienes «ser ricos, no es malo». Eso quedó para los pendejos que son millones y millones de venezolanos a quienes les viven cantando que todo va a mejorar, como aquella vieja guaracha: “en el mes de mayo me caso, en el mes de mayo. Yo te digo el día, yo te digo el mes, pero el año no te lo digo, no te lo diré». Lo robado, lo saqueado al país, es inconmensurable. Servidores de confianza de Chávez, militares y civiles, responden hoy ante la justicia norteamericana por parte de esa rapiña revolucionaria.
En tiempos del inicio de la crisis, Venezuela nadaba sobre miles de millones de dólares provenientes de la venta del petróleo que era y es de todos los venezolanos. Existe información de la emisión de 14 mil millones de dólares para, presuntamente, superar la crisis eléctrica, pero, al parecer, todo se lo robaron. La situación empeora cada día.
Y este cronista que no sabe leer, pero le escriben, ha sabido que este desastre de la electricidad , de la quiebra de PDVSA, de las empresas estadales del sur del país y todos los problemas que tenemos, sólo se solucionarán cuando llegue un gobierno responsable y medianamente eficiente al que los organismos financieros internacionales le presten unos 74 mil millones de dólares para ser invertidos en nuevas fuentes de generación eléctrica, en recomponer la industria petrolera y llevarla otra vez a una producción de 3 millones 500 mil barriles diarios , como la agarró Chávez, y eso no va a suceder porque saben que se los van a robar y despilfarrar como hicieron con esa descomunal montaña de miles de millones de dólares que se calculan en más de dos billones que ingresaron a este país en estas dos décadas perdidas.
Al comienzo de la pandemia del Covid 19, Maduro solicitó 5 mil millones de dólares al Fondo Monetario Internacional, presuntamente para enfrentar la enfermedad, y le encajaron el dedo índice de la mano derecha entre el índice y pulgar de la mano izquierda. No le prestarán ni una «locha negra».
La historia nos recuerda que los Estados Unidos de América, esa gran nación que hoy cobija buena parte de los venezolanos que se vieron obligados a dejar su patria grande, y hasta ladrones revolucionarios que cada día les van poniendo el guante, destinó trece mil millones de dólares (plan Marshall) para iniciar la reconstrucción de las ciudades europeas destruidas por los criminales bombardeos de los alemanes, y Venezuela ha recibido en estos 22 años de revolución corrupta más de diez mil planes Marshall, y el país está devastado.
Emiro Albornoz León/Periodista-Asesor.
