OPINIÓN

APUNTES DEL CRONISTA: BARRIO EL PONIENTE (LOS HATICOS) Y SU GENTE

POR: DR. REYBER PARRA CONTRERAS*

Cada 20 de mayo se celebra en Venezuela el Día del Cronista, con motivo del natalicio de Enrique Bernardo Núñez, quien en 1945 fue designado como primer cronista oficial de Caracas. En el marco de esta festividad, el pasado 18 de mayo participamos en la presentación del libro Barrio El Poniente (Los Haticos) y su gente, de la autoría de Ana María Romero Pirela, publicación que derivó del proyecto de investigación: El barrio cuenta su historia, con registro y aval institucional de la Oficina del Cronista de Maracaibo.

A propósito de esta obra, escribimos el siguiente texto preliminar que forma parte de la misma:

A la par de la historia en la que prevalece el protagonismo de los grandes personajes, o de aquella que está compuesta por los hechos que abren paso a los cambios en la sociedad, franquea en la cotidianidad de las comunidades una historia sigilosa, aquella que va entretejiéndose a partir de la convivencia cercana de quienes comparten la pertenencia a un terruño, bien en una aldea, vecindario, barrio o en cualquier otro espacio que facilite el encuentro de sus moradores. Esta historia de campanario, como solía llamarla el historiador mexicano Luís González,  se propone aportar el relato del paso del tiempo en la vida diaria, tanto de las personas y sus familias, de los vecinos y de todos aquellos que forman  parte esencial de la singularidad histórica de una comunidad.

La microhistoria es de gran importancia para entender los procesos identitarios que nos unen como seres sociales, capaces de relacionarnos a partir de la impronta que el tiempo nos impone. Mediante nuestra presencia en el tiempo vamos moviéndonos en la dualidad pasado- presente, desde donde emerge la memoria.  Esta última es, ciertamente, la base de la identidad, sin la cual sería imposible reconocernos pertenecientes a un grupo o colectivo. Promover la microhistoria es una forma acertada de preservar la memoria, y por ende, de procurar la proximidad entre quienes conviven en un mismo espacio, es decir, de unirlos desde el vínculo de la común procedencia u origen.

La labor de Ana María Romero en su obra: Barrio El Poniente (Los Haticos) y su gente, se orienta a la conservación de la memoria de quienes habitan una zona emblemática de Maracaibo, la de los pequeños hatos en su zona baja, de mediados del siglo XIX; y en su parte alta,  asiento de familias de artesanos y trabajadores petroleros, que a comienzos del siglo XX llegaron procedentes de diversas partes de Venezuela, y algunos desde el exterior.

La historia de El Poniente transcurre signada por el trabajo y los aportes de muchos personajes, que a lo largo del pasado siglo, impactaron en la cotidianidad de la barriada, configurando su identidad comunitaria y transmitiendo a las futuras generaciones los valores que son propios de nuestro pueblo maracaibero: solidaridad, empatía y laboriosidad. A partir de la investigación de Ana María Romero podemos no solamente identificar los nombres, sino también conocer la impronta de varios de estos hombres y mujeres en la historia de El Poniente, entre ellos:Ana Julia Pírela, Edelmira Linares de Meneses, Rafaela Chiquinquirá Portillo, Olimpíadas Linares Rivas, Ramón Pirela Molina, Ramón Carrizo, Eromides Vega, Hernán Pírela, Vicente Jiménez Suárez, Teotiste Serrano, Miguel Ángel Romero, Giuseppe Costanza, Manuel Taborda, Francisco Ocando, Andrés Hernández, Cayetano Montiel, Douglas Enrique Casado, Ángel Esteban Hernández y María Del Carmen Acevedo.

Gracias a la iniciativa de Ana María Romero, los maracaiberos de El Poniente tienen la oportunidad de acercarse a su historia, de reconocerse parte de una tradición que no ha desaparecido, y que ellos en la actualidad están dándole continuidad por medio de su trabajo, del día a día de la convivencia comunitaria y de la edificación de sus respectivas familias.

En este sentido, desde la Oficina del Cronista de Maracaibo, queremos estimular la participación de los jóvenes y en general de quienes estén motivados a indagar en la historia de sus comunidades, para que mediante un trabajo mancomunado con esta institución, podamos salvaguardar el testimonio de los abuelos y vecinos que tienen algo que narrar sobre el recorrido histórico de su sector, barrio o urbanización. La experiencia de Ana María Romero con su libro, nos indica que la entrevista, como técnica fundamental en la historia oral, puede conducirnos a la comprensión de nuestras raíces. Avancemos en esta dirección y sumemos esfuerzos en la noble tarea de preservar la memoria de nuestro pueblo.

 

*Cronista de Maracaibo. Profesor de historia de Venezuela en la Universidad del Zulia. Miembro de la Academia de Historia del Estado Zulia, E-mail: [email protected] Instagram: @cronistademaracaibo Twitter: @CronMaracaibo

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