EL HOMBRE CERO DE TASAJERAS…
POR: FRANCISCO CHÁVEZ
Cronista del Municipio Lagunillas
En tiempos del Presidente Medina un suceso que conmovió y permanece en el recuerdo fue el acontecimiento con el joven obrero Clímaco Estrada.
Y ustedes preguntarán, y quién era Clímaco Estrada? Bueno vamos a contar la historia brevemente. Clímaco Estrada era un joven que transportaba leche de Tasajeras a Lagunillas, el cual permaneció tres días desaparecido. Siendo encontrado casi moribundo entre matorrales. Había sido víctima de una bestial castración por parte de dos individuos. Los moradores de Tasajeras atribuyeron la aparición de Clímaco Estrada a la devota fe procesada en San Benito por parte del agraviado.
Clímaco Estrada fue trasladado al Hospital municipal de Cabimas el único que existía en todo el distrito Bolívar. El caso de Clímaco Estrada produjo conmoción nacional.
¿Saben ustedes lo que en aquella época significaba cuando decían que a un tipo le habían castrado?
Un tal doctor Pérez atendió este caso grave, recibiendo reseña periodística nacional, como consecuencia de su promocionado logro asistencial. Sorpresa mayor causo cuando el colegio médico de Caracas descubrió que el tal doctor Pérez no era médico. Se trataba de un osado practicante de origen colombiano que se hacía pasar por médico usurpando el título de un galeno fallecido.
Al contar su historia Clímaco Estrada, refería que San Benito le había salvado de morir, ya que durante su agonía un hombre negro le visitaba dándole agua y atención a su herida. Nunca le hablaba, sólo se limitaba a curarlo. Para él, sólo San Benito podría ser ese desconocido. Por otra parte, tres sujetos pagaron condena por este delito: los autores materiales identificados como: Erasmo y Abelardo Bracho (Hermanos), y otro sujeto de nombre: Hermenegildo Colina (autor intelectual)
Clímaco Estrada vivió por largo tiempo, eso sí castrado, y según el decir popular «capado» pasando la «dentera» de ver a tan hermosas y apetitosas morenas tasajereñas y lagunilleras
